
Trabajó 9 años en el tiempo de reportero (Sentir que es un soplo la vida nació de ese trabajo) y un día, el mismo día que firmaba el contrato para su primera novela publicada Tuyo es mi corazón, conoció nada más y nada menos que a Ernesto Sábato. Sábato, muy sabatiano, como sabemos, le dijo que muchos grandes escritores posteriores a su generación se habían malogrado haciendo periodismo. Y cuando Juan José Hoyos le dijo que era también periodista Sábato lo hizo jurar sobre una edición de El tunel que abandonaría tal oficio en cuanto pudiera. Juan José se retiró del periodismo poco tiempo después.
No por ello para él, como para García Márquez, es uno de los mejores oficios del planeta tierra. Desde que abandonó El tiempo, se dedicó a las clases en la en la facultad de comunicaciones de la Universidad de Antioquia. Este mismo año piensa retirarse a escribir esa novela en la que viene trabajando hace rato.
Imposible resumir todo lo que nos contó aquella noche de la semana pasada en el café Eureka, de Girardota. Nos donó uno de sus últimos libros, Contando historias,el arte y el oficio de narrar en el periodismo, una joyita. Buen material de consulta no solo para los que quieran llegar a dominar el oficio de escribir cronicas, sino tambien literatura.
No hay comentarios:
Publicar un comentario